En 2021 alcanzamos la cúspide del nivel 2 en la conducción autónoma
Los niveles de conducción autónoma definen el grado en el que el vehículo asume la responsabilidad de su conductor y sus funciones. Y es que como ya veíamos en otro artículo, el vehículo inteligente ya es una realidad que avanza a pasos agigantados.
Desde Nebrimática nos interesamos por todo lo que sea aplicar innovación tecnológica en pro de una mejor calidad de vida; disponer de más tiempo, automatizar tareas y funciones… ¡Sigue con nosotros y te ponemos al día!
¿Qué son los vehículos inteligentes?
Se denominan así a medios de transporte equipados con formas de inteligencia artificial impulsadas por sistemas, a diferencia de los mecanismos que funcionan por procesos o acciones de las personas.
El objetivo subyacente del automóvil inteligente es liberar al conductor de muchas de las tareas mundanas asociadas con la conducción, haciendo que el acto de conducir sea más seguro o placentero. A menudo, los defensores de este tipo de innovación señalan que al relevar al conductor de al menos parte del proceso de toma de decisiones, se abre la posibilidad de que el uso generalizado de automóviles inteligentes ayude a que las carreteras sean mucho más seguras de lo que son hoy.
El Coche Fantástico ¿ya está aquí?
La idea de un automóvil inteligente ha existido desde hace décadas. Las películas y los programas de televisión a veces presentan vehículos con inteligencia artificial muy desarrollada; hasta el punto de que algunos incluso son capaces de pensar y actuar de forma independiente. Ya vimos algunos de estos comportamientos en la famosa serie de los 80, Knight Rider, conocida en España como El Coche Fantástico.
La realidad del automóvil inteligente no es tan avanzada como estas representaciones teatrales de la pequeña y la gran pantalla. Aunque los continuos esfuerzos para aprovechar al máximo la tecnología existente, han conducido a una serie de innovaciones ya presentes en nuestros vehículos, mientras otras se están probando en la actualidad.
Innovaciones presentes
El desarrollo de automóviles inteligentes ya ha dado lugar a algunas versiones que son comunes en muchas marcas y modelos. Un ejemplo es el moderno sistema automático de notificación de emergencia. Con éste, los sensores del vehículo se conectan con una organización de apoyo central y transmiten señales de socorro cuando hay una colisión o algún tipo de fallo mecánico. Estos mismos sistemas también permiten la interacción de voz entre el conductor y un equipo remoto de profesionales, que puede alertar a las autoridades o brindar asistencia a un conductor lesionado o enfermo.
Protección, seguridad, confort
Muchas de las características previstas para la producción de automóviles inteligentes tienen que ver con la protección del conductor y de otros vehículos en la carretera. ¿Cómo es posible? Veamos ejemplos:
- Una función de control de crucero autónomo se activa automáticamente cuando las condiciones de la vía son favorables para mantener una velocidad constante. Con esto, se minimizan las posibilidades de viajar por encima del límite de velocidad indicado.
- Los faros que se encienden automáticamente cuando las condiciones de luz disminuyen hasta un punto específico.
- Un sistema de advertencia de cambio de carril que se activa cuando hay tráfico continuo. Ésta prestación puede ayudar a los conductores a evitar accidentes y lesiones.
Se están invirtiendo grandes esfuerzos en crear automóviles inteligentes para la producción en masa, y algunos de ellos están encabezados por organizaciones y comisiones aprobadas por gobiernos. Algunas empresas privadas también están involucradas en los continuos esfuerzos para desarrollar el automóvil inteligente definitivo. Actualmente, entre las características en desarrollo se incluyen:
- La capacidad del automóvil para conducir de manera segura sin la intervención de un conductor humano.
- Un sistema de monitoreo que detectaría cuando un conductor está intoxicado, sufriendo algún tipo de problema médico o incapacitado para conducir por cualquier otra razón.
- Otros sistemas de reconocimiento de señales de tráfico que permitan a los vehículos detectar e interpretar en tiempo real las señales viales colocadas a lo largo de la carretera.
«Sin duda alguna, de entre todos estos avances, uno de los más llamativos es la conducción autónoma».
Joseba Iglesias (Director Comercial, Nebrimática)
Conducción autónoma
La SAE, la Sociedad de Ingenieros Automotrices, ha definido cinco niveles en la evolución de la conducción autónoma. Cada nivel describe hasta qué punto un automóvil asume las tareas y responsabilidades de su conductor, y cómo interactúan ambos entre sí.
¿Cuáles son los niveles de conducción autónoma?
Es bastante sencillo. Lo que ahora se llama Nivel 1 existe desde hace algunos años, y el Nivel 2 también ha llegado a ser común en los vehículos más modernos. En 2021 nos encontramos en la cúspide del Nivel 2, y el próximo gran avance, la conducción sin intervención humana durante largos períodos de tiempo, supondrá el salto al Nivel 4 y, quizá, al Nivel 5.
Durante los últimos años, las marcas de automóviles han comenzado a usar la terminología de los cinco niveles de autonomía. Por ejemplo, el Nivel 3 de autonomía se usó específicamente durante la promoción del último Audi A8.
Los niveles 0 a 5 se definen de acuerdo con su grado relativo de automatización. Veamos cada uno de ellos:
Autonomía de nivel 1: un solo aspecto automatizado
El nivel 1, el tipo más básico de autonomía, es aquél en el que un elemento del proceso de conducción se controla de forma aislada. Para ello utiliza datos de sensores y cámaras, pero el conductor sigue estando a cargo de la conducción del vehículo. Este nivel comenzó a ponerse en práctica a finales de la década de 1990 en Mercedes-Benz, con su pionero control de crucero administrado por radar. Por su parte Honda introdujo la asistencia de mantenimiento de carril en el Legend 2008. Estos fueron los primeros pasos para eliminar las tareas del conductor al volante.
Los coches más actuales están clasificados como vehículos de nivel 1, ya que el Control de Estabilidad es un requisito para todos los modelos desde 2012. El Control de Crucero (acceleración/desaceleración) o la tecnología de corrección de carril también se consideran de nivel 1. Este grado de asistencia ofrece cierta tranquilidad al conductor, pero éste debe mantenerse atento a la carretera en todo momento.
- ¿Cuándo? Los primeros pasos en las décadas de 1990-2000
- ¿Qué incluye? Asistente de mantenimiento de carril, control de crucero automático
- ¿Quién conduce? El conductor está en control del vehículo
Autonomía de nivel 2: control de dos o más elementos
El nivel 2 define el grado de autonomía de la mayoría de los vehículos modernos: equipados con ordenadores que se hacen cargo de múltiples funciones de control. Estos son lo suficientemente inteligentes como para ocuparse de los sistemas de velocidad y de dirección, entretejiendo múltiples fuentes de datos. El último Mercedes S-Class es de nivel 2+. Asume las funciones de dirección, aceleración y freno en uno de los sistemas de control de crucero más avanzados que se hayan visto hasta la fecha. Para ello, utiliza datos precisos de navegación por satélite para frenar automáticamente en las esquinas delanteras, manteniendo una distancia establecida con el automóvil que se encuentra delante. Aunque también poniendo en marcha el vehículo de forma automática cuando se reanuda el tráfico tras una parada por un atasco o semáforo en rojo, mientras el conductor está inactivo.
Los sistemas como el Autopilot de Tesla o el Pilot Assist II de Volvo son características bien conocidas de automatización de nivel 2. Ayudan al conductor a mantenerse en su carril, y pueden reducir la velocidad o incluso detener el vehículo para evitar a otros coches en las cercanías. Los sistemas de aparcado automático también ayudan al conductor con ciertas tareas. Las capacidades de nivel 2 ofrecen asistencia mejorada sobre ciertas funciones, pero el control del vehículo sigue estando en manos del conductor.
- ¿Cuándo? El estado actual de la técnica de automoción
- ¿Qué incluye? Modo de cambio de carril, funciones de estacionamiento automático, etc.
- ¿Quién conduce? Se requiere la participación activa del conductor en todo momento
Autonomía de nivel 2+: en un lugar intermedio
En algún punto entre el nivel 2 y el nivel 3 se encuentra el nivel 2+, que define funciones presentes en los vehículos más avanzados de la actualidad. En este nivel es donde la mayoría de los fabricantes de automóviles esperan estar en poco tiempo. Es un nivel que ha sido acuñado por Nvidia, y aunque no llega al nivel 3, caracterizado por la conducción automática, presenta diferencias reseñables respecto al nivel 2 básico. El conductor todavía debe estar alerta y en control de la situación, pero el vehículo ha alcanzado una gran capacidad para detectar su entorno, y puede hacer ajustes cuando sea necesario. Además del exterior, el coche también puede detectar ciertos patrones en el propio conductor, y puede controlar aspectos como el cansancio.
- ¿Cuándo? Presente en modelos de gama alta
- ¿Qué incluye? Monitoreo del conductor y tareas más complejas
- ¿Quién conduce? El conductor, pero el automóvil es más consciente de lo que sucede alrededor
Autonomía de nivel 3: automatización condicional
Los vehículos altamente automatizados no están muy lejos. El SAE llama al nivel 3 ‘automatización condicional’; un modo específico que permite que todos los aspectos de la conducción sean realizados automáticamente por el vehículo. Aunque lo más importante es que el conductor debe estar disponible para responder a una solicitud de intervención. Audi considera su nuevo A8 un automóvil autónomo listo para el nivel 3. Esto significa que el automóvil tiene el potencial de conducirse a sí mismo en ciertas circunstancias, en las que asumirá el control de todas las funciones críticas para la seguridad. Sin embargo, para llegar a ese punto, aún deben refinarse mapas, radares, sensores, así como fusionar todos los datos ambientales con procesadores y sistemas lógicos más inteligentes y rápidos.
Teniendo en cuenta los requisitos anteriores, el anuncio de Audi puede parecer precipitado, pero gracias a las actualizaciones inalámbricas (OTA), un coche actual puede experimentar mejoras considerables durante su vida útil. Así que en realidad, esta aseveración no es tan descabellada como pudiera parecer.
Hasta la fecha, no existen auténticos coches de nivel 3, aunque varios, como el prototipo A7 de Audi, se encuentran en fase de desarrollo. Este nivel ha generado controversia. Y es que muchos consideran que no es realista esperar que un conductor se mantenga alerta para poder actuar cuando sea necesario, si sólo se le pide que preste atención a lo que hace su coche, sin tomar parte activa en la conducción en sí. Muchos fabricantes, como Tesla, pretenden pasar directamente del nivel 2 al 4 por este motivo.
- ¿Cuándo? 2022-2025
- ¿Qué incluye? sensores de próxima generación, algoritmos, nuevas leyes de circulación
- ¿Quién conduce? El conductor debe estar alerta, pero puede estar inactivo durante ciertos períodos de tiempo
Autonomía de nivel 4: totalmente autónomos en situaciones determinadas
A principios de la próxima década, los automóviles podrán conducirse completamente a sí mismos dentro de ciertas áreas metropolitanas. Éstas deben estar geodefinidas con mapas en HD, disponer de datos más precisos de circulación, comunicación entre automóviles, y con centros externos (para hacer frente a peligros inusuales).
«Realmente no hará falta conductor en el Nivel 4», dice el gurú de la automatización de Mercedes, Christoph von Hugo. “Lo más probable es que alquilaremos el automóvil, en lugar de comprarlo. No lo llevaremos de vacaciones a Florida, pero lo usaremos para un viaje urbano por Nueva York, por ejemplo. Es más fácil tener mapas ultra detallados para áreas cuidadosamente definidas.” Veinte fabricantes de automóviles dicen que venderán automóviles autónomos en los EE.UU. para 2022.
En la actualidad, fabricantes como Ford y Google han declarado que saltarán el nivel 3 y desarrollarán vehículos de nivel 4. Aunque estos coches podrán conducirse a sí mismos, incluirán aparatos de control de la conducción como volantes, frenos y acelerador, para que un humano pueda conducirlos manualmente cuando las condiciones superen las circunstancias predefinidas de conducción autónoma (como conducir campo a través, o en un lugar sin mapas digitales fiables), o simplemente, cuando les apetezca conducir a la manera tradicional.
- ¿Cuándo? 2022-2030
- ¿Qué incluye? sistemas totalmente automáticos y sistemas de control manual.
- ¿Quién conduce? el vehículo; auténtica conducción sin manos
Autonomía de nivel 5: el conductor es opcional…
La diferencia entre el nivel 4 y 5 es simple: el último paso hacia la automatización total no requiere que el automóvil se encuentre en un entorno urbano completamente controlado, el llamado «dominio de diseño operativo». En lugar de ello, podrá conducir por su cuenta en cualquier lugar. ¿Cómo podría llegar a ser posible? Gracias al ingente volumen y calidad de los datos suministrados a los sistemas de navegación, y la sofisticación de los ordenadores que los procesarán.
Se trata de un mundo que el automóvil Waymo de Google está intentando hacer realidad, trascendiendo los esfuerzos de los fabricantes tradicionales. Si llegamos a este punto, la disrupción sería enorme: los analistas pronostican 21 millones de vehículos de nivel 5 en todo el mundo para 2035.
Los prototipos de nivel 5 no se parecen en nada a los coches actuales. Para empezar, no tienen volante ni pedales. En su lugar, se están diseñando para mejorar la comodidad y la productividad de los pasajeros, con características propias de oficinas y salas de recreo.
Pero este nivel no está garantizado. La tecnología para hacerlo posible sigue siendo especulativa, y serán necesarias nuevas regulaciones para gobernar las carreteras, que no están garantizadas. Estos factores determinarán si algún día dejaremos las carreteras al arbitrio de los robots.
- ¿Cuándo? Mediados de 2030, o nunca
- ¿Qué incluye? Otro sistema de vehículo muy diferente al actual
- ¿Quién conduce? el vehículo y posibilidad de manual con volante. Darán lugar a los Robo-taxis de largo alcance
Confiar en la Tecnología
Concluyendo, esto es lo que nos queda. Además de confiar en los grandes desarrolladores tecnológicos, en materia de conducción automática se espera una legislación específica que regule el uso y condiciones de los vehículos inteligentes. ¿Qué opinión te merecen a ti?
Nosotros ya estamos pensando en el vehículo de niveles 3-4 que interconectaremos con la nube y así facilitar la gestión de los desplazamientos a nuestros clientes. ¿Te animas a prepararte para ello? Hablamos cuando quieras.